Un pregón-concierto sublime en O Caramiñal
reportaje de CHECHU rIO
La procesión de la borriquita pudo hacerse el domingo en todo su recorrido. J.A. VIQUEIRA |
ADEPTOS EN LA COMARCA
Los actos organizados por las diferentes cofradías religiosas con motivo de la Semana Santa no dejan de sorprendernos y, con razón, esas celebraciones gana cada año más y más adeptos. En A Pobra rivalizan sanamente los vecinos de las parroquias de O Caramiñal y O Castelo por atraer a un mayor número de personas con actividades que deslumbran por su vistosidad y singularidad. Una de ellas tuvo lugar en la tarde del sábado en la iglesia de Santa María A Antiga con el peculiar y original pregón concierto de Alexandre Fontán, director del coro Capela Lauda Sión, que versó sobre la tradición musical de la Pascua pobrense. Para ello, contó con la participación excepcional del grupo de teatro de Riveira dirigido por Segundo Durán, cuyos miembros salieron de luto y con candiles para escenificar la procesión de Os Caladiños, mientras los integrantes de la sección de percusión de la banda de música de A Pobra habían sonar los tambores. Y el mencionado coro rememoró algunas piezas antiguas que sonaban en días determinados.
El templo de O Caramiñal estaba abarrotado de gente, que se emocionó con cada palabra de Fontán y las canciones interpretadas, y que algunos llegaron a calificar de “sublime”. Con razón, al acabar la lectura del pregón, los presentes se pusieron en pie y durante unos diez minutos aplaudieron a raudales a los participantes en ese sensacional espectáculo. Y no menos relevante resultó la procesión del Domingo de Ramos, que contó con la participación de alrededor de 800 palmeros que se colocaron en tres filas detrás de la imagen que escenificaba la entrada de Jesús en Jerusalén y que fue portada por una decena de niños y niñas en representación de los apóstoles. La salida tuvo lugar en el Cantón da Leña y recorrió la Rúa Castelao y regresó al punto de partida por la Rúa da Ponte. La Cofradía del Santo Cristo y Oración en el Huerto tiene guardada alguna sorpresa más para los próximos días que espera sean del agrado del público y que, a buen seguro, llenarán de magia las calles de la parroquia pobrense.
Y en la parroquia de Santiago do Deán, el domingo por la mañana se celebró una concurrida procesión de la borriquita, una tradición que sigue arraigada entre los vecinos y que la Cofradía del Santo Entierro y Nuestra Señora de la Soledad trabaja con denodados esfuerzos para mantenerla. El buen tiempo atrajo a mucha gente a esta actividad, que los organizadores cifraron en unas 400 personas. A diferencia de otros años, en que llovió, en esta ocasión se hizo el recorrido completo desde la iglesia de Santiago do Castelo, por Cardenal Patiño, Rafael Calleja y regreso desde la Praza de Galicia por la Rúa da Paz hasta A Covecha y llegada al templo. Para los próximos días anuncia la salida el Jueves Santo, si el tiempo lo permite, del Cristo de la Sentencia y su anda, cuya restauración tuvo un coste total de unos 7.000 euros, mientras que para la procesión del Viernes Santo de una anda nueva -con un coste de 1.500 euros- para la urna con el Cristo Yacente
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